En sí la película me encantó: los efectos, los actores... Claro que todo el tiempo creí que Henley (la maga) era Amy Adams y hasta los créditos me enteré que era Isla Fisher, pero bueno, no es mi culpa que se parezcan tanto, jaja. La actriz francesa que la hace de agente de la Interpol me impresionó por lo bonita que está, aunque debo admitir que hubo un tiempo en el que dudé de su lealtad. Mark Ruffalo está bien, siento que es mi tipo de galán, sólo que al final no me cayó tan bien, como que la neta sí me pareció muy jalado que sea él el autor intelectual de todo. ¿Y qué decir de Jesse Eisenberg? ¡Ni idea que era él! A la otra me fijo en el póster antes de entrar a la sala.
Confieso que los 115 minutos que dura la película me recordaron al show que vi hace no mucho en el Auditorio Nacional. Como se llamaba "Los Ilusionistas" también, mi cerebro los relacionaba. Pero obvio ni al caso. Bueno, sólo por los trucos, pero acá la historia está muy macabra, eso de robar millones de esa manera suena muy science fiction.
Finalmente, una breve reflexión: ¿es correcto o no hacer justicia por nuestra propia mano? Yo siempre digo que no, pero claro, nunca he estado en una situación extrema de deseo de venganza. Por otro lado, admito que tengo que trabajar el tema de la confrontación, porque no es algo que me busco (de hecho le huyo), pero independientemente de eso yo creo que en este asunto tiene mucho que ver la fe.
Siempre he creído que la vida es causa y efecto, y ahora que estudio Kabbalah, más. Es real. Lo que hacemos se nos regresa, lo que pensamos se hace realidad, lo que deseamos para los demás es lo que al final nos pasa a nosotros. Cuando no hay pureza de intención las cosas (la mayoría de las veces) no salen bien. Y finalmente la verdad siempre sale. Entonces creo que deberíamos confiar más en la vida, la luz, el destino, Dios, como le llamemos, que lo que tiene que ser, será, y lo que no tiene que ser, pues no será. Ahora sí que como dicen por ahí: cuando te toca, ni aunque te quites. Cuando no, ni aunque te pongas. Por eso creo que es más sano y más inteligente elegir –con conciencia– confiar, perdonar, superar, fluir y seguir, que clavarnos en algo que, ok, no estuvo padre, pero ya pasó.
En lugar de desear el mal a quienes nos lo hicieron, hay que rezar por ell@s y continuar nuestro camino. Creo que es la forma mejor y más práctica que tenemos para ser felices. Y bueno, para hacerle justicia a la movie, debo decir que me encanta que Dylan Rhodes (el del FBI) se enamore de la francesita Alma Dray (de la Interpol), y que la vaya a buscar a París. ¡¡Aaaahhhh!! Fue mi escena favorita porque, like I've always said, "el amor hace nuevas todas las cosas", o dicho de otra manera, transforma (megapositivamente) a las personas <3 Bien decían los Beatlles: ALL WE NEED IS LOVE.
Estimada Bianca, comparto tu opinión en eso de hacer las cosas por venganza no deja nada bueno es un desgaste físico y emocional cañon, pero en fin... He tenido la oportunidad de escuchar Kabbalah en radio con Ariel Grunwald y se me hace muy cool que ahora relaciones tus temas con la Kabbalah... y como dice Karen Berg: "Son los que hacen algo por compartir con los demás los que alcanzan el éxito verdadero y duradero"
ResponderEliminarWow! Amé tu comentario, gracias por compartir :)
ResponderEliminar